Esta forma de preparar los boquerones era muy típica de mi madre y cuando María flojeaba en comer pescado resultó genial, si se los preparaba así se los bebía...ahora ya no hay problemas con eso pero a ella y a mi marido les encantan.
Ingredientes para 4 personas (recordad que es picoteo):
- 1/2 kilo de boquerones.
- Limón y sal.
- 1 huevo.
- Pan rallado.
- Abundante aceite.
Preparación:
Limpiamos los boquerones de forma que queden como un libro, unidas ambas mitades únicamente por la parte final de la espina central y la cola, eliminando tripas, cabeza y espina.
Los vamos colocando en un recipiente por capas, espolvoreándole sal a cada capa y un buen chorreón de limón. Yo los suelo hacer por la mañana y los dejo en el frigórifico hasta por la noche para que tomen bien el sabor del aliño.
Pasamos los boquerones por huevo y pan rallado, friéndolos en abundante aceite bien caliente y escurriéndolos sobre papel absorvente.
Os advierto que son como las pipas!!!
domingo, 20 de febrero de 2011
sábado, 19 de febrero de 2011
Huevos al nido (huevos rellenos)
El nombre de la receta es de mi madre, no sé por qué le llamaba así a esta forma de preparar los huevos....jeje, Dori era así. A María le encantan y aunque aún ahora no pega demasiado, en verano es una cenita estupenda.
Ingredientes:
- Tantos huevos como se desee, si utilizamos media docena nos salen, lógicamente, 12 mitades.
- 2 o 3 latas de atún (según el número de huevos).
- Mahonesa.
- Pimiento morrón y maiz dulce (ambos opcionales).
Preparación:
En una olla con abundante agua ponemos los huevos (en frío) y añadimos un chorro de vinagre, una vez que comiencen a hervir los dejamos unos 15 minutos.
Una vez tenemos hechos los huevos, los dejamos enfriar un poco y procedemos a quitarles la cáscara (como truco para las que tengan menos experiencia, deciros que si les dais golpecitos suaves se resquebrajan un poco y se pelan muy fácil).
Partimos cada huevo por la mitad, a lo largo, con cuidado de no romperlos y separamos la yema, las claras las vamos colocando en la fuente de presentación. Ponemos todas las yemas en un bol, añadimos las latas de atún y 2 o 3 cucharadas de mahonesa (en este momento podemos poner el pimiento morrón o bien añadirlo como decoración al final).
Trabajamos con un tenedor la mezcla de huevo, atún y mahonesa, de forma que nos quede esponjosa pero consistente, ya que con ella rellenaremos las mitades de clara reservadas, si veis que queda seco o que os cuesta trabajar la mezcla le añadís más mahonesa.
Tras rellenar todas las mitades con la mezcla ponéis lo que os sobre entre los huevos, de forma que quede una forma compacta, cubrís con una fina capa de mahonesa y decoráis con maiz y/o pimiento morrón, si queréis, mi madre también ponía una capa de lechuga cortada muy finita como base de los huevos.
A comer. Cuando tenga fotos las subo
Ingredientes:
- Tantos huevos como se desee, si utilizamos media docena nos salen, lógicamente, 12 mitades.
- 2 o 3 latas de atún (según el número de huevos).
- Mahonesa.
- Pimiento morrón y maiz dulce (ambos opcionales).
Preparación:
En una olla con abundante agua ponemos los huevos (en frío) y añadimos un chorro de vinagre, una vez que comiencen a hervir los dejamos unos 15 minutos.
Una vez tenemos hechos los huevos, los dejamos enfriar un poco y procedemos a quitarles la cáscara (como truco para las que tengan menos experiencia, deciros que si les dais golpecitos suaves se resquebrajan un poco y se pelan muy fácil).
Partimos cada huevo por la mitad, a lo largo, con cuidado de no romperlos y separamos la yema, las claras las vamos colocando en la fuente de presentación. Ponemos todas las yemas en un bol, añadimos las latas de atún y 2 o 3 cucharadas de mahonesa (en este momento podemos poner el pimiento morrón o bien añadirlo como decoración al final).
Trabajamos con un tenedor la mezcla de huevo, atún y mahonesa, de forma que nos quede esponjosa pero consistente, ya que con ella rellenaremos las mitades de clara reservadas, si veis que queda seco o que os cuesta trabajar la mezcla le añadís más mahonesa.
Tras rellenar todas las mitades con la mezcla ponéis lo que os sobre entre los huevos, de forma que quede una forma compacta, cubrís con una fina capa de mahonesa y decoráis con maiz y/o pimiento morrón, si queréis, mi madre también ponía una capa de lechuga cortada muy finita como base de los huevos.
A comer. Cuando tenga fotos las subo
FIDEOS CON MARISCO
Esta receta no es de mi madre, pero como la hice antes de ayer y tengo fotos, pues hala, la subo; la verdad es que es bastante de andar por casa y la hago sacando ideas de varios platos (paella, fideuá...), pero en fin, en casa nos gusta mucho.
Ingredientes:
- 1/4 y mitad de chirlas.
- 1/4 y mitad de gambas.
- 1 choco o 2 calamares.
- 1 cebolla.
- 1 diente de ajo.
- 1/2 lata de tomate triturado (lata de 400 gramos) o 1 tomate rallado.
- 1 pastilla de caldo de pescado.
- Azafran o colorante.
- Perejil, aceite y sal.
- Fideos gordos (yo utilizo como un tercio de un paquete pequeño).
Preparación.
Ponemos las almejasen un recipiente con agua y sal, manteniéndolas una hora como mínimo para que suelten la arenilla que puedan tener.
Pelamos las gambas y las reservamos, las cabezas las sofreimos a fuego medio en una cacerola pequeña con un poco de aceite y cuando tomen color las aplastamos un poco para que suelten todo el jugo, añadimos 1/2 litro de agua y lo dejamos a fuego lento unos 10 minutos, apartamos y colamos, reservamos.
En una cazuela amplia ponemos un fondo de aceite y pochamos la cebolla y el ajo picaditos, añadimos el pimiento verde troceado y dejamos que se refria un poco, agregamos el tomate y lo freimos (debe perder casi todo el agua) echando la pastilla de caldo de pescado cuando esté casi seco.
A continuación echamos el choco o calamar, troceado o en anillas respectivamente, y el perejil, dejamos que se haga todo junto unos minutos, también hasta que veamos que queda sequito.
Añadimos los fideos y les damos unas vueltas, agregamos el caldo de las gambas que teníamos reservado y el azafran o colorante, rectificamos de sal.
Agregamos a continuación las gambas reservadas y las chirlas (yo les quito las conchas) y dejamos que se hagan los fideos.
Lo dejamos reposar un par de minutos fuera del fuego y a la mesa.
Ingredientes:
- 1/4 y mitad de chirlas.
- 1/4 y mitad de gambas.
- 1 choco o 2 calamares.
- 1 cebolla.
- 1 diente de ajo.
- 1/2 lata de tomate triturado (lata de 400 gramos) o 1 tomate rallado.
- 1 pastilla de caldo de pescado.
- Azafran o colorante.
- Perejil, aceite y sal.
- Fideos gordos (yo utilizo como un tercio de un paquete pequeño).
Preparación.
Ponemos las almejasen un recipiente con agua y sal, manteniéndolas una hora como mínimo para que suelten la arenilla que puedan tener.
Pelamos las gambas y las reservamos, las cabezas las sofreimos a fuego medio en una cacerola pequeña con un poco de aceite y cuando tomen color las aplastamos un poco para que suelten todo el jugo, añadimos 1/2 litro de agua y lo dejamos a fuego lento unos 10 minutos, apartamos y colamos, reservamos.
En una cazuela amplia ponemos un fondo de aceite y pochamos la cebolla y el ajo picaditos, añadimos el pimiento verde troceado y dejamos que se refria un poco, agregamos el tomate y lo freimos (debe perder casi todo el agua) echando la pastilla de caldo de pescado cuando esté casi seco.
A continuación echamos el choco o calamar, troceado o en anillas respectivamente, y el perejil, dejamos que se haga todo junto unos minutos, también hasta que veamos que queda sequito.
Añadimos los fideos y les damos unas vueltas, agregamos el caldo de las gambas que teníamos reservado y el azafran o colorante, rectificamos de sal.
Agregamos a continuación las gambas reservadas y las chirlas (yo les quito las conchas) y dejamos que se hagan los fideos.
Lo dejamos reposar un par de minutos fuera del fuego y a la mesa.
viernes, 11 de febrero de 2011
ALBÓNDIGAS EN SALSA
Ingredientes para 4 personas.
Albóndigas:
- 1/4 de carne de ternera y 1/4 de carne de cerdo (mi madre siempre decía de seleccionar en la carnicería los trozos y pedir que nos la picaran, no comprarla ya picada), no obstante se puede utilizar únicamente un tipo de carne, al gusto y posibilidades de cada uno.
- 2 huevos.
- 3 dientes de ajo.
- 1 cebollita fresca.
- 1 pellizco de perejil.
- Pan rallado o harina.
- 1 pellizquito de nuez noscada.
- 1/2 vaso de vino blanco.
- 1 trocito de pan duro.
- Sal.
Salsa:
- Aceite.
- 1 cebolla pequeña.
- 1 diente de ajo.
- 1 pellizco de perejil.
- 3 granos de pimienta.
- Vino blanco (utilizaremos parte del medio vaso anterior)
- Azafrán o colorante.
- Media pastilla de caldo de carne.
- 1 hoja de laurel.
- Sal y 1/2 cucharadita de harina.
ELABORACIÓN.
En un recipiente pequeño ponemos el trocito de pan duro, añadimos un poco de agua y la mitad del vino blanco.
En un recipiente grande echamos los dos huevos con un poco de sal y los batimos, añadiéndole dos de los tres dientes ajo bien picaditos, la cebollita fresca picada y el pellizco de perejil, tras mezclar todo muy bien añadimos la carne y trabajamos bien la mezcla, para que la carne quede bien impregnada, añadiendo además la nuez noscada. Escurrimos el trozo de pan y lo agregamos, junto con un poco de pan rallado para que la masa espese y podamos formar bien las albóndigas.
Tras formar las albóndigas las pasamos por harina o pan rallado (al gusto) y las freimos en abundante aceite bien caliente, reservamos.
Si os soy sincera este paso, que es el más engorroso, os lo podéis saltar si compráis en una carnicería de confianza donde venden las albóndigas ya hechas, yo de hecho así lo hago, pero ya os digo, siempre que sea un sitio de confianza.
Una vez que tenemos fritas las albóndigas comenzamos con la salsa, que yo os recomiendo siempre hacer a fuego medio, en general la cocina realizada a fuego medio o lento es la que queda más sabrosa.
En una cazuela con un fondo de aceite (que cubra el fondo, no más para que no queden aceitosas) sofreimos la cebolla picada, como truco deciros que si añadís sal a la cebolla se pocha con más facilidad.
Mientras se pocha la cebolla realizamos un majado con 1 diente de ajo, un pellizo de perejil y los granitos de pimienta, y una vez que lo tengamos majado todo añadimos el resto del vino blanco.
Cuando la cebolla esté pochada (transparente y blandita) añadimos la media cucharadita de harina y mezclamos bien, añadiendo seguidamente el majado, el azafrán o colorante y una hoja de laurel; añadimos un poco de agua (para que os hagáis una idea yo utilizo el mortero como medida en este caso, así de camino rebaño lo que ha podido quedar de majado, lleno la mitad del mortero más o menos) y la mitad de la pastilla de caldo de carne.
Dejamos hervir unos 5 minutos y añadimos las albóndigas que teníamos reservadas, cubrimos con agua (yo os recomiendo ser prudentes con el agua, siempre es mejor tener que añadir que no encontrarnos con las albóndigas aguadas) y dejamos hervir unos 5 minutos más hasta que veamos que se queda en salsita, probamos de sal y rectificamos en caso necesario.
Os pongo una foto de cómo han quedado las mías, las hice ayer antes de tomar la decisión de crear el blog, así que no os puedo colgar fotos de todos los pasos, pero cuando las haga otra vez las tomaré y os las pondré.
¡A COMER!
Albóndigas:
- 1/4 de carne de ternera y 1/4 de carne de cerdo (mi madre siempre decía de seleccionar en la carnicería los trozos y pedir que nos la picaran, no comprarla ya picada), no obstante se puede utilizar únicamente un tipo de carne, al gusto y posibilidades de cada uno.
- 2 huevos.
- 3 dientes de ajo.
- 1 cebollita fresca.
- 1 pellizco de perejil.
- Pan rallado o harina.
- 1 pellizquito de nuez noscada.
- 1/2 vaso de vino blanco.
- 1 trocito de pan duro.
- Sal.
Salsa:
- Aceite.
- 1 cebolla pequeña.
- 1 diente de ajo.
- 1 pellizco de perejil.
- 3 granos de pimienta.
- Vino blanco (utilizaremos parte del medio vaso anterior)
- Azafrán o colorante.
- Media pastilla de caldo de carne.
- 1 hoja de laurel.
- Sal y 1/2 cucharadita de harina.
ELABORACIÓN.
En un recipiente pequeño ponemos el trocito de pan duro, añadimos un poco de agua y la mitad del vino blanco.
En un recipiente grande echamos los dos huevos con un poco de sal y los batimos, añadiéndole dos de los tres dientes ajo bien picaditos, la cebollita fresca picada y el pellizco de perejil, tras mezclar todo muy bien añadimos la carne y trabajamos bien la mezcla, para que la carne quede bien impregnada, añadiendo además la nuez noscada. Escurrimos el trozo de pan y lo agregamos, junto con un poco de pan rallado para que la masa espese y podamos formar bien las albóndigas.
Tras formar las albóndigas las pasamos por harina o pan rallado (al gusto) y las freimos en abundante aceite bien caliente, reservamos.
Si os soy sincera este paso, que es el más engorroso, os lo podéis saltar si compráis en una carnicería de confianza donde venden las albóndigas ya hechas, yo de hecho así lo hago, pero ya os digo, siempre que sea un sitio de confianza.
Una vez que tenemos fritas las albóndigas comenzamos con la salsa, que yo os recomiendo siempre hacer a fuego medio, en general la cocina realizada a fuego medio o lento es la que queda más sabrosa.
En una cazuela con un fondo de aceite (que cubra el fondo, no más para que no queden aceitosas) sofreimos la cebolla picada, como truco deciros que si añadís sal a la cebolla se pocha con más facilidad.
Mientras se pocha la cebolla realizamos un majado con 1 diente de ajo, un pellizo de perejil y los granitos de pimienta, y una vez que lo tengamos majado todo añadimos el resto del vino blanco.
Cuando la cebolla esté pochada (transparente y blandita) añadimos la media cucharadita de harina y mezclamos bien, añadiendo seguidamente el majado, el azafrán o colorante y una hoja de laurel; añadimos un poco de agua (para que os hagáis una idea yo utilizo el mortero como medida en este caso, así de camino rebaño lo que ha podido quedar de majado, lleno la mitad del mortero más o menos) y la mitad de la pastilla de caldo de carne.
Dejamos hervir unos 5 minutos y añadimos las albóndigas que teníamos reservadas, cubrimos con agua (yo os recomiendo ser prudentes con el agua, siempre es mejor tener que añadir que no encontrarnos con las albóndigas aguadas) y dejamos hervir unos 5 minutos más hasta que veamos que se queda en salsita, probamos de sal y rectificamos en caso necesario.
Os pongo una foto de cómo han quedado las mías, las hice ayer antes de tomar la decisión de crear el blog, así que no os puedo colgar fotos de todos los pasos, pero cuando las haga otra vez las tomaré y os las pondré.
¡A COMER!
jueves, 10 de febrero de 2011
EL COMIENZO
Hoy precisamente, aunque sin razón especial alguna, comienzo a escribir este blog; pretendo con él una doble tarea, por una parte hacer un pequeño homenaje a Teodora López Asenjo (Dori para todos los que la queríamos), mi madre, fantástica cocinera e infinitamente mejor persona, que falleció hace ya casi 5 años. La segunda tarea es mucho más obvia, ofrecer recetas que ella elaboraba, con una cocina sencilla pero muy sabrosa, que puede sacar de apuros a personas sin experiencia, a aquellas que precisan cocinar para muchos o que desean una vuelta a esa cocina realizada con amor y tiempo, con ingredientes frescos y básicos que configuran una dieta variada y plena de sabores.
Dori era una persona especial y su cocina también, nacida en Sevilla pero criada en Burgos, su cocina mezcla usos y costumbres de ambas tierras. Las recetas que irán apareciendo en este blog las conseguí con santa paciencia, porque ella cocinaba "a ojo" como decía (un poquito de sal, un chorreón de vino...) y yo me las veía y me las deseaba para apuntar medidas que ella se negaba a facilitarme ("no sé hija, yo lo hago según voy viendo"); finalmente conseguí una medida, el vaso de caña (para quién no sepa qué es es un vaso pequeño, como los del café en los bares) y así pude entender un poco mejor.
Es curioso que con el paso del tiempo yo también he aprendido a cocinar "a ojo", pero aquí os pondré todas las medidas, sean o no ortodoxas (nunca hablaré en centílitros) y todos los pasos, por obvios que parezcan, para que podáis elaborar la receta exactamente como lo hacía ella.
Mañana pondré la primera receta, hoy simplemente quería inaugurar este blog y sentirme, quizás, un pelín más cerca de ella.
Dori era una persona especial y su cocina también, nacida en Sevilla pero criada en Burgos, su cocina mezcla usos y costumbres de ambas tierras. Las recetas que irán apareciendo en este blog las conseguí con santa paciencia, porque ella cocinaba "a ojo" como decía (un poquito de sal, un chorreón de vino...) y yo me las veía y me las deseaba para apuntar medidas que ella se negaba a facilitarme ("no sé hija, yo lo hago según voy viendo"); finalmente conseguí una medida, el vaso de caña (para quién no sepa qué es es un vaso pequeño, como los del café en los bares) y así pude entender un poco mejor.
Es curioso que con el paso del tiempo yo también he aprendido a cocinar "a ojo", pero aquí os pondré todas las medidas, sean o no ortodoxas (nunca hablaré en centílitros) y todos los pasos, por obvios que parezcan, para que podáis elaborar la receta exactamente como lo hacía ella.
Mañana pondré la primera receta, hoy simplemente quería inaugurar este blog y sentirme, quizás, un pelín más cerca de ella.
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